Nado entre espejos,
alguien aún ausente.
Distingo el reflejo,
y entrando en mi mente,
oculto por muros,
me río, inconsciente...

Lo que una vez fue
ya no será,
y el tiempo que elijo
nunca fue verdad.
Pretendo encontrar
algo que no existió
más allá de lo que he dejado atrás...

Otro intento fallido
surge entre los conceptos
de un mundo dormido,
alcanzado por el tiempo.

Ese ojo que me mira
nunca llegará adentro,
pues soy yo el que respira
este último aliento.
No seré tu mesías,
sólo iré con el viento.
Llegaré como el día,
cuando termine tu tiempo...

Corta es nuestra estadía,
infinito este infierno.
Largas noches sombrías,
soledad, dolor eterno,
cruenta melancolía,
y rencor, todo dentro...

Quizás el momento
ha pasado para mi.
Sangrando, mi espectro,
vigilante, desde aquí,
llegado el momento