Sunday, July 24, 2005
Come and watch
Dentro del eterno silencio el ocaso impide al horizonte ver las yermas tierras que circundan mi guarida.
En el frío de mis sombras enfrento al tiempo, guareciéndome de los vendavales de ilusiones que alguna vez, creo recordar, me trajeron aquí...
No hay mucho que contar... Realmente no es mucho lo que sé sobre este inhóspito paraje. La reseca y cansada tierra, resquebrajada por el peso de eternidades de soledad y tristeza, ya no llora ni se lamenta por el tiempo perdido, y parece preferir su papel de inmutable testigo y aceptar lo que cree su destino.
La tenue luz ha logrado una que otra vez confundir mi vista, haciendo brotar algo de belleza entre toda esta nada.
Sólo el cielo tiene aún fuerzas para expresar su tristeza, llorando de vez en vez, más el suelo sufre en silencio el sorpresivo ataque acumulando el llanto de tiempos inmemoriales, único recuerdo de lo que alguna vez fue.
Refugiándome de todo abatimiento espero el tiempo que no parece traer cambios.
En mi soledad he descubierto que no soy lo único que vive aquí, he luchado contra el parásito de la desconfianza y sentido el aguijón de la traición. Quise una vez escaparme con las alas del amor, mas la luz del orgullo, irradiada por mi eterno ocaso, encegueció mis ojos y pensamiento, obligándome a buscar mi actual morada.
Ya cansado y sin ganas de esperar mejorías, escribo un recuerdo para el futuro...
 
Do you care? manifestó esto a las 8:56 PM | 0 ha(n) opinado